* El gobernador reveló que los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública estaban en manos de civiles armados de la Policía Tecampanera luego de un enfrentamiento ocurrido el martes

 

Jesús Saavedra

 

Cuatro de los cinco detenidos tras el enfrentamiento ocurrido en un retén establecido por la Policía Tecampanera en Teloloapan, son policías que estaban “francos”, reveló el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien dijo que se buscaba la manera que fueran entregados a las autoridades estatales, lo que ocurrió ayer mismo.

La noche del martes hubo un enfrentamiento en el retén del grupo de civiles armados que hacen labores de seguridad en Teloloapan, que se ubica en el paraje conocido como El Hule, en la salida hacia Arcelia en la carretera federal, cuando pretendieron revisar a los ocupantes de un vehículo.

El resultado fue un policía tecampanero de 17 años herido en un brazo, cinco personas detenidas y dos automóviles en los que viajaban los presuntos agresores, un Volkswagen Vento gris con placas de circulación HBZ-4234 y una camioneta Honda Odyssey que se utiliza como carroza funeraria.

Cuestionado sobre esos hechos al concluir un evento en Casa Guerrero, el gobernador admitió que hay cinco personas (del grupo de agresores) que fueron detenidas por los comunitarios en esos hechos, “dentro de ellos cuatro policías estatales francos que iban pasando”.

Astudillo Flores aceptó que los cinco detenidos estaban en manos de la Policía Tecampanera, por lo que están “haciendo las gestiones para que a través del diálogo los liberen”.

Se le preguntó si tenía que ver con la advertencia de ‘La Familia Michoacana’ que hizo a través de una videograbación de que arremetería contra ese grupo de comunitarios por estar ligados a sus enemigos del cartel de Guerreros Unidos, Astudillo Flores dijo que “no creo que tenga que ver con el video, el video es un tema que el gobernador tiene que insistir, no me atemorizo, estoy firme y lamentó que existan posiciones tan ruidosas, escandalosas y groseras”.

Por otro lado, el gobernador informó que “por prudencia” decidió no asistir al tradicional desfile en Tixtla para conmemorar el 235 natalicio del general Vicente Guerrero y decidió realizar un acto en el Palacio de Gobierno.

Dijo que no quiso que su presencia en ese acto cívico se hubiese tomado como una “provocación” a grupos de inconformes relacionados con el movimiento de los normalistas de Ayotzinapa, “por eso tomamos la determinación de hacer un evento en Chilpancingo, Tixtla tiene todo mi respaldo y mi respeto, y debo de poner de mi parte para que no haya ningún conflicto”.

También se refirió al programa de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para atender la problemática de la desaparición forzada de personas y de violaciones a las garantías individuales.

Al respecto mencionó que “mi gobierno ha sido insistente en respeto a los derechos humanos, mi gobierno en 22 meses ha sido normal dentro del trato a estos temas, hay asuntos que vienen de atrás que creo debemos de cuidarlos”.

Respecto al caso del asesinato de Armando Chavarría Barrera, dijo que en una reunión que sostuvo con la viuda del extinto político perredista y sus hijos hace como veinte días, “en ningún momento tocamos el tema de algún exgobernador (Zeferino Torreblanca), en ningún momento, creo que he tratado de poner mi parte para evitar alguna circunstancia de incomodidad para la familia, las investigaciones no se hacen para que le gusten o no a alguien, se hacen conforme a lo que van arrojando las técnicas de investigación”.

Agregó que el fiscal Xavier Olea Peláez “ha hecho el intento de obtener alguna información, he tratado de poner mi parte para lograr que las cosas mejoren en esa investigación, pero de ninguna manera se ha tocado el tema de alguien en lo particular, de ser o no ser responsable; la reunión fue atenta, cordial, como merece la señora y recordando que Armando Chavarría fue muy mi amigo”, precisó.