* Ya se registraron dos altercados menores a causa de la imposición de comisario
Bernardo Torres
Pobladores de la comunidad de Palo Gordo, municipio de Juan R. Escudero (Tierra Colorada), se enfrentaron a golpes en al menos dos ocasiones, por la disputa que mantienen hace más de un mes por el control de la comisaría.
A finales del año pasado se llevó a cabo la elección de comisario en la localidad mediante votaciones, donde de acuerdo al número de votos, el ganador fue el señor José Leonor Peñaloza Villa, en contra de Samuel Domínguez Rodríguez.
Sin embargo, los representantes del Ayuntamiento de Juan R. Escudero no dieron a conocer públicamente los resultados y dieron por ganador a Samuel Domínguez, a decir de los habitantes, por instrucciones del alcalde Leonel Leyva Muñoz.
Al tener conocimiento de esta acción, los pobladores no aceptaron al comisario impuesto, y nombraron a José Leonor Peñaloza, a quien entregaron las llaves de la comisaría y el sello oficial, y se firmó un acta a pesar de no estar reconocido por el Ayuntamiento.
Expusieron que hasta ahora el Ayuntamiento se ha negado a reconocer al comisario electo por la ciudadanía y en días pasados intentaron sacarlo e “imponer a Samuel Domínguez, pero fue impedido por los ciudadanos.
Los días 11, 12, 13 y 14, en la comunidad se lleva a cabo la fiesta patronal en honor a la “Virgen de Guadalupe”, la cual se efectuó a decir del comisario “legítimo” y avalado por la ciudadanía, con limitaciones, para la cual el gobierno municipal no aportó un sólo peso, como era la tradición.
Este 27 de enero, el comisario nombrado por el Ayuntamiento pretendió realizar una segunda fiesta, promovida por el alcalde, a la cual destinó una fuerte cantidad de dinero, lo que causó la molestia del pueblo, al considerar que se estaban alterando las costumbres y tradiciones de la comunidad.
Ante la insistencia del comisario “impuesto” y un grupo de ciudadanos, determinaron este jueves cerrar el acceso principal al poblado e impedir el paso de negocios y grupos de música que participarían en la feria, hecho que provocó un primer choque entre los pobladores.
Por la tarde, refirió el señor Peñaloza Villa, un grupo de mujeres llegó hasta el bloqueo y lo agredieron físicamente, “me desgreñaron y me cachetearon”, y posteriormente lo acusaron de haberlas agredido, aun cuando hay testigos de estos hechos.
La mañana de ayer el bloqueo fue reforzado, al igual que el grupo opositor se reforzó, y en las primeras horas de dio un segundo intercambio de golpes, y amagaban con desalojar el bloqueo.
Fue hasta entonces cuando el Ayuntamiento envió una comisión de funcionarios para dialogar con ambas partes, y evitar una confrontación mayor, pues algunos ciudadanos portaban incluso machetes.
Una patrulla con seis elementos de la Fuerza Estatal también arribó al poblado para vigilar el desarrollo del conflicto, y calmar los ánimos de los pobladores.
Las negociaciones fueron infructuosas, pues un grupo insiste en que no se debe llevar a cabo otra fiesta y el comisario impuesto por el alcalde debe renunciar, condiciones que no fueron aceptadas y la disputa continuará en los días siguientes, con el riesgo de un nuevo enfrentamiento. (API)