* Ayer, elementos de fuerzas federales detuvieron en Iguala a quien como secretario de Seguridad Pública de Iguala, coordinó el operativo contra estudiantes de la Normal de Ayoztinapa la noche del 26 de septiembre de 2014

 

* Su aprehensión ocurrió cuando realizaba una visita a su esposa, informó Renato Sales

 

Alondra García

 

Dos años 25 días después de los ataques contra normalistas de Ayotzinapa, por parte de policías municipales de Iguala y sicarios de Guerreros Unidos, que dejaron un saldo de 6 personas muertas y 43 estudiantes desaparecidos, ayer fue detenido en esa ciudad Felipe Flores Velázquez, ex secretario de Seguridad Pública de Iguala, quien es señalado como el responsable de ordenar el operativo contra los jóvenes en la noche del 26 de septiembre de 2014.

Flores Velázquez se desempeñó como jefe policiaco durante el gobierno municipal que encabezó José Luis Abarca Velázquez, quien está recluido por estos hechos junto con su esposa María de los Ángeles Pineda Villa.

Las investigaciones hechas por la Procuraduría General de la República apuntan a que Flores Velázquez fue uno de los responsables de coordinar el operativo policiaco que derivó en la agresión contra los estudiantes que tuvo como saldo seis muertos y 43 normalistas desaparecidos.

Al extitular de Seguridad Pública de Iguala se le imputan los delitos de delincuencia organizada y secuestro en contra de los jóvenes de la Normal Rural de Ayotzinapa.

Asimismo, en declaraciones recabadas por la autoridad ministerial, se le señala por encubrir a los policías municipales de Iguala en la desaparición de los normalistas.

También es señalado por acatar la instrucción ilegal del ex alcalde José Luis Abarca, consistente en perseguir y atacar a los normalistas que se trasladaban hacia la Plaza de las Tres Garantías, ubicada en el zócalo de dicha localidad, donde María de los Ángeles Pineda Villa, entonces presidenta del DIF municipal rendía su segundo informe de labores, el 26 de septiembre de 2014.

De acuerdo con información de inteligencia, Flores Velázquez presuntivamente ordenó a los policías municipales frenar a los estudiantes, lo que derivó en dos enfrentamientos que dejaron como saldo, decesos y lesiones a personas ajenas a los hechos, así como la desaparición de los 43 normalistas. Desde entonces, el exjefe policiaco era prófugo de la justicia.

 

La captura, sin un solo disparo

 

En conferencia de prensa, el comisionado nacional de Seguridad, Roberto Sales Heredia, informó que las dependencias que integran el Gabinete de Seguridad “desarrollaron por varios meses trabajos de investigación sustentados en el análisis de redes de vínculos y trabajo de gabinete, que permitieron ubicar el lugar en el que se encontraba” el ex jefe policiaco.

Detalló que una vez que confirmaron su paradero en la cabecera municipal de Iguala, se implementó un operativo por elementos de la Policía Federal, así como personal del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), con el apoyo de la Procuraduría General de la República (PGR), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de Marina (Semar).

La captura de Flores Velázquez se realizó sin que se detonara ningún solo disparo y con ello se cumplimentó la orden de aprehensión girada por el Juez Tercero de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en el estado de Tamaulipas.

El ahora detenido fue puesto a disposición ante la autoridad que lo requiera, que determinará su situación jurídica.

Sobre la detención de Flores Velázquez, la procuradora de la República, Arely Gómez González dijo que permitirá recabar una declaración fundamental para esclarecer la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

A través de su cuenta de Twitter, la funcionaria se congratuló por la captura de este sujeto ligado al cártel Guerreros Unidos, que estuvo dos años prófugo de la justicia y por el que la PGR ofrecía una recompensa de 2.5 millones de pesos a quien entregara información fidedigna para dar con su paradero.

El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Roberto Campa Cifrián calificó el hecho como una buena noticia para los padres de los estudiantes, porque han visto una esperanza de poder tener más información.

El funcionario federal dijo que los padres de familia fueron informados de la detención de Flores Velázquez por conducto del subprocurador de Derechos Humanos de la PGR, Eber Omar Betanzos Torres.

 

La guarida del prófugo

 

La casa en la que Felipe Flores Velázquez se escondió de la justicia se encuentra en Iguala, la misma ciudad en la que hace poco más de dos años dio la orden a la Policía Preventiva de perseguir y atacar a los normalistas de Ayotzinapa.

Una vivienda de dos pisos, de pintura rústica color rojo terracota y vidrios oscuros, fue señalada por los vecinos como la casa en la que el exjefe policiaco y su esposa vivían, y donde fue capturado según las autroridades.

La casa se ubica en el número 12 de la calle Atropos, en la colonia Fovissste. Su exterior luce limpio y bien cuidado.

“Miren, aquí la gente es muy alborotista, pero ahí es, ahí en la casa donde vieron la camioneta, ahí es”, comentó una vecina a los reporteros. Sin embargo, se negó a detenerse y abundar en la información, por temor a ser vista.

Frente a la casa estaba estacionada una camioneta blanca de modelo reciente. Dentro de la vivienda se alcanzaban a ver las siluetas de hombres vestidos con guayabera. Los vecinos indicaron que se trataba de personal de la PGR.

Las calles que rodean a esta colonia están descuidadas y sucias. Cientos de papeles, bolsas y hojas de árboles se agitan y flotan con el viento, dando la apariencia de que no han sido aseadas desde hace varios meses.

Sin embargo, la calle en la que se ubica la casa que sirvió como escondite del jefe policiaco destaca por su pulcritud y su arquitectura, mucho más lujosa que las casitas de interés social que están a su alrededor.