* El alcalde de Chilpancingo dijo que funcionarios de la paraestatal le dijo que si no pagaba 1.7 millones de pesos ayer, cortarían el servicio a la Capach y la ciudad se quedaría sin agua

 

Alondra García

 

El alcalde Antonio Gaspar Beltrán no descartó la posibilidad de “tomar” las casetas de peaje en la Autopista del Sol para pagar el adeudo de 10 millones de pesos que la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) tiene con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

En entrevista, informó que el jueves acudió a la Secretaría de Gobernación (Segob) para solicitar el apoyo del gobierno federal, además que dialogó este viernes con Eduardo Escamilla López, gerente de Suministro de Servicios Básicos de la CFE en la región sur-sureste.

El alcalde capitalino dijo que Escamilla López demandó el pago de un millón 700 mil pesos para las tres de la tarde de este viernes y le advirtió que en caso de incumplir, se cortaría el suministro eléctrico a los sistemas de bombeo de la Capach, lo que dejaría sin agua a toda la ciudad.

Gaspar Beltrán dijo que le explicó al funcionario que no contaba con recursos para pagar este viernes, porque también tenía que pagar la nómina a los trabajadores, y le solicitó una prórroga de algunos días para realizar el pago, pero el gerente regional de la CFE se negó a ampliar el plazo.

Ante la negativa, Gaspar Beltrán acudió este viernes al puerto de Acapulco para “hacérsela llorona” al gobernador Héctor Astudillo Flores y solicitarle un préstamo, o en su caso un adelanto en las participaciones.

El primer edil aseveró que la situación financiera en la Capach es crítica y por ello hizo un llamado al delegado del gobierno federal en Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, para que lo ayude a gestionar una tarifa especial de servicio eléctrico ante la CFE.

Incluso advirtió que como último recurso, no descarta encabezar la toma de casetas de peaje en la Autopista del Sol para llamar la atención del gobierno federal.

“Tomar casetas nos lo van a dejar como último camino. El presidente de la República (Andrés Manuel López Obrador) nos enseñó a ser luchones y yo realmente siento a veces una frialdad hacia los municipios. Así que no nos va a quedar de otra. Puede que (tomar casetas) sea en serio”, apuntó.

Además, anunció que se cortará el servicio de agua potable a los usuarios morosos para aumentar la recaudación, e incluso dijo que él personalmente acudirá a cobrar impuestos y servicios a las empresas deudoras.

“A las empresas me las voy a agarrar yo, que el propio presidente ande de cobrón. Voy a ir a cobrarles el predial y el agua potable a esos peces gordos”, dijo.

Gaspar Beltrán reconoció que esta situación podría generarle “impopularidad”, pero su prioridad es gobernar bien.

 

Estiaje eleva la deuda con la CFE

 

El presidente municipal informó que la capital tiene un requerimiento de 500 litros de agua por segundo, pero debido al estiaje el suministro apenas llega a los 200 litros.

Para subsanar esta situación, el bombeo se está realizando de manera permanente, lo que elevó la factura por consumo eléctrico a cuatro millones de pesos.

A esto se suman los tres millones de pesos que se requieren mensualmente para el pago de nómina.

Sin embargo, la Capach tiene una recaudación de apenas tres millones, lo que genera una deuda mensual de cuatro millones de pesos al organismo operador de agua potable.

Gaspar Beltrán destacó la solidaridad del gobernador Héctor Astudillo Flores para ir solventando mes con mes los pasivos que se acumulan en la Capach.

Pero reconoció que “es tiempo de que los chilpancingueños se hagan cargo del sistema de agua potable y asuman su responsabilidad”.