* Aseguraron que tenían contratos eventuales temporales, pero muchos de ellos tenían una antigüedad laboral de 6, 10 y hasta quince años

Rosario García

Trabajadores despedidos del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) en Guerrero, con el apoyo de integrantes de otras organizaciones gremiales, marcharon esta mañana por las calles de Chilpancingo en protesta por la decisión del gobierno federal de echar a la calle a partir de ese mes.
Tres semanas después de que iniciaron un plantón en las oficinas de ese subsistema educativo por su despido injustificado, los inconformes iniciaron una marcha desde la glorieta de Las Banderas al Congreso del Estado, para exigir a los diputados locales su intervención ante el gobierno federal para que dé marcha atrás a la cancelación de contratos.
“No pueden decir que es una acción por la austeridad, porque lo que nos pagan son salarios muy bajos”, y ejemplificó que los sueldos en esa dependencia son entre los 2 mil y 3 mil pesos quincenales.
Onam Pacheco Miranda, quien hasta el pasado 3 de mayo era trabajador operativo de la delegación estatal de Conafe, enfatizó que el único punto de negociación que se ha planteado es la reinstalación de los 37 trabajadores despedidos, 21 de ellas madres de familia, el pago de las dos quincenas y respeto a sus derechos laborales.
Dijo que los trabajadores descartan cualquier posibilidad de aceptar alguna liquidación o retiro voluntario. “La exigencia es la reinstalación en el cargo, y pedimos el pago de las dos quincenas que están corriendo y que se nos ha privado”, señaló.
Informó que de las gestiones ante la Dirección Nacional de Conafe, desde el inicio de su protesta, se les ha informado que a finales de este 31 de mayo recibirán una resolución sobre la necesidad de su permanencia o no en la delegación estatal.
Los trabajadores despedidos laboraban en la dependencia federal por contratos eventuales temporales, pero muchos de ellos tenían una antigüedad de 6, 10 y hasta quince años.
Durante la movilización, se instaló de manera paralela una mesa de trabajo con el delegado único del gobierno federal en el estado, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, quien los atendió después de más de 20 días de protesta, para buscar una salida al pliego petitorio de los inconformes.