* Marco Cabada presentó una iniciativa para reformar la Ley Federal del Trabajo con el objetivo de regular la prostitución en México, y evitar que quienes se dedican a esa actividad por voluntad propia no sufran explotación

Carlos Navarrete

El diputado local por Morena, Marco Antonio Cabada Arias, presentó una iniciativa de reforma a la Ley Federal del Trabajo, con la que pretende regular el comercio sexual o prostitución, a fin de garantizar derechos laborales para las personas que se dedican a esa actividad.
La propuesta fue planteada en la sesión del Congreso del Estado de este jueves y fue turnada a la Comisión de Desarrollo Económico, en donde se determinará si la iniciativa se envía o no a la Cámara de Diputados federal.
En su exposición de motivos, Cabada Arias expresó que en México y otros países de Latinoamérica y Europa es clara la existencia de personas que se dedican al comercio sexual por voluntad propia, de forma libre, sin que se ejerza sobre ellas ningún tipo de violencia.
Indicó que la prostitución no puede ni debe pasar inadvertida, pues se practica todo el territorio mexicano, pero advirtió que la inexistencia de una regulación permite la explotación de quienes se dedican a esa actividad.
Dijo que el no reconocimiento del comercio sexual como una actividad laboral, impidió en otros países la sindicalización de las trabajadoras, y comentó que el debate sobre sus derechos se desvió cuando se visibilizó la tragedia de las personas migrantes indocumentadas, traficadas y forzadas a dar servicios sexuales, haciendo a un lado el intento de organización de las personas que se dedican a la prostitución.
“En México es necesario debatir sobre esto, pues se está filtrando una mezcla conceptual entre comercio sexual y trata con fines de explotación sexual. Dicha confusión se difunde en los medios y configura actos discursivos que logran un cierto efecto en la sociedad y en el gobierno”, consideró.
Afirmó que reiterar las historias de mujeres víctimas de trata, sin aludir también a las historias de las trabajadoras sexuales, favorece “posturas fundamentalistas” que evitan un debate serio sobre el comercio sexual.
“Hay que luchar contra la trata, y respetar y apoyar a las personas que se dedican al comercio sexual. La regulación de éste mejora la convivencia en una sociedad, donde el sexo servicio es una práctica de años, de la que, si bien muchas personas se escandalizan, también lo es que es un trabajo (…) las sexoservidoras trabajan con el único fin una remuneración económica”, argumentó.
Ante ese escenario, el diputado de Morena expresó que es necesario buscar una regulación al comercio sexual, a fin de que existan normas que garanticen condiciones de trabajo, prestaciones y deberes, incluso refirió que se debe garantizar seguridad a quienes ejerzan esa actividad porque actualmente son un grupo vulnerable.
“Por ello las condiciones de trabajo deben basarse en el principio de igualdad entre hombres y mujeres, ni podrán ser inferiores a las fijadas por la Ley y deberán ser proporcionales a la importancia de los servicios, por lo que debemos considerar el sexo servicio como una práctica laboral, donde hay una relación sexual válida de trabajo, y no un delito, pues lo que existe es un trabajo donde hay voluntad y consentimiento”, señaló.
Su iniciativa de reforma propone adicionar un capítulo al título sexto de la Ley Federal del Trabajo, denominado Servicios de Relaciones Sexuales, con tres artículos. El primero plantea garantizar la salud, dignidad, integridad, derechos y el valor de la persona humana.
El segundo establece que el servicio de relaciones sexuales consiste en el intercambio libre y consentido -entre personas, sean de su mismo sexo o de sexo opuesto mayores de edad- de relaciones sexuales mediante una remuneración cierta y en dinero.
“Si el intercambio carece de la voluntad y libre consentimiento de la persona que presta el servicio, o se compromete a ésta empleando violencia, intimidación, engaño, amenazas o abusando de una situación de superioridad, de necesidad o vulnerabilidad del sexo servidor, se aplicarán las disposiciones penales correspondientes, debiendo seguir el procedimiento legal correspondiente”, se lee en la iniciativa.
El tercer artículo prohíbe el ejercicio del servicio de relaciones sexuales por personas menores de edad.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Desarrollo Económico para su análisis y posterior dictaminación. En caso de que el dictamen sea a favor de la propuesta, se someterá a consideración del pleno y si obtienen los votos suficientes el Congreso la turnará a la Cámara de Diputados, que es la instancia facultada para realizar reformas a leyes federales.