* La directora, Irma Lilia Garzón, reveló que la paramunicipal presenta pasivos por más de 61 millones 430 mil 666 pesos y es “incapaz de sobreponerse de manera eficiente”

Alondra García

Trabajadores de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach), marcharon por las calles de la capital para exigir que el gobierno del estado asuma el rescate financiero del organismo paramunicipal.
La marcha comenzó a las 10:00 horas de ayer con la participación de unos 100 trabajadores agremiados a la Sección XXXII del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG).
La movilización partió de las oficinas de la Capach, ubicadas en el barrio de San Mateo y concluyó en el palacio de gobierno, al sur de la ciudad.
Los trabajadores del organismo operador del agua entregaron un documento dirigido al gobernador en el que pidieron su “respaldo y colaboración proporcionando recursos económicos que coadyuven al rescate financiero” de la Capach.
En días pasados, el alcalde Antonio Gaspar Beltrán informó que la paramunicipal estaba en quiebra financiera, por lo que consideró la posibilidad de privatizarla.
Los sindicalizados advirtieron que la privatización de la Capach pondría en riesgo el empleo de todos los trabajadores.
De acuerdo con un informe presentado a principios de octubre por la directora de la Capach, Irma Lilia Garzón Bernal, el organismo presenta pasivos por más de 61 millones 430 mil 666 pesos y es “incapaz de sobreponerse de manera eficiente a sus costos de operación, producción, mantenimiento e inversión, considerando el rezago en materia de infraestructura y mantenimiento”.
La Capach cuenta con una plantilla de 370 trabajadores y eroga una nómina mensual de aproximadamente 3 millones 300 mil pesos.
La paramunicipal tiene un padrón de 39 mil 163 usuarios activos, divididos en usos comercial, doméstico, fijo, industrial, micro comercial y públicos.
La morosidad de los usuarios alcanza los 190 millones de pesos, tres veces más que los pasivos que enfrenta la Capach.