* La empresa consultora se basó en el análisis de las cifras del informe Intercensal realizado por el INEGI

 

Fernando Hernández

 

A pesar de los avances en las estrategias federales para la disminución del analfabetismo, el estado de Guerrero continúa siendo una de las tres entidades con los mayores índices de rezago educativo.

Así lo reveló la consultoría Parametría en su carta denominada Panorama de la educación en México que difundió este lunes en su página de internet.

En el documento se informa que de acuerdo con los resultados de su última Encuesta Intercensal, el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática que indica si bien entre 2010 y 2015 el porcentaje de niños y niñas que asisten a la escuela aumentó de un 94.7 por ciento a un 96.2 por ciento en el estado de Guerrero, la realidad dista mucho de ser halagadora.

Y es que la consultoría puntualiza que Guerrero está dentro del conjunto de entidades federativas con la menor cantidad de niños que asisten a las escuelas, junto con los estados de Oaxaca, Chiapas, además de Chihuahua, Jalisco, Colima, Michoacán, Guanajuato, Puebla, Veracruz, y Campeche.

Además, de acuerdo con el análisis de Parametría que se desprende de estadísticas de INEGI, se indica que Guerrero es uno de los estados con la menor cantidad de años de escolaridad.

Es decir en promedio el tiempo que dura la escolaridad de los guerrerenses no rebasa los 7.7 años, a diferencia de estados como la Ciudad de México que se encuentra en el nivel más alto del ranking con 11.1 años que dura el proceso de formación educativa de sus habitantes.

Las cifras anteriores revelan que en promedio, la mayoría los guerrerenses ni siquiera termina su educación secundaria.

Solo por debajo de Guerrero, se ubica Oaxaca, en donde el promedio de años de escolaridad es de 7.2 años. Las cifras coinciden con los datos que indican que Guerrero es uno de los estados con menor población de entre 6 y 14 años que asisten a la escuela.

Así se manifiesta que Guerrero no sólo es una de las entidades con los mayores índices de miseria e inseguridad, sino que también en las que se concentra el mayor rezago educativo.